Cultura del café
¿Cómo Moler Café Sin Molinillo?
El sabor del café en grano es único, conserva mejor el sabor y el aroma. En este artículo de Somos el Café queremos contarte cómo moler café sin molinillo. ¡Tomá nota!
El café en grano existe desde siempre y desde ese momento las personas contaban con un molinillo en el hogar para poder hacer uso del mismo.
Años después, con la llegada del café molido y las otras presentaciones de café, como ser el café instantáneo o las cápsulas, el café en grano perdió un poco la estelaridad entre los amantes de esta bebida. Esto se debió, más que nada, a los tiempos de la vida moderna caracterizados por “vivir acelerados”.
Ingresá a esta nota: Café molido versus café instantáneo: ¿Cuál es mejor?
No obstante, al día de hoy, el café en grano volvió a ponerse de moda. Todo esto se dio gracias al café de especialidad que posicionó nuevamente al café en grano como una opción premium.
La marca Lavazza cuenta con una variedad de café en grano para que disfrutes de un exquisito café italiano. ¡Conocé los productos!
¿Por qué elegir café en grano?
Si sos amante del café, te recomendamos elegir café en grano. Las razones son varias. A continuación, te contamos algunos de los beneficios del café en grano.
Mejor conservación del olor y aroma: El café en grano al no estar procesado conserva todos los olores y aromas a diferencia de lo que ocurre con un café molido, el cual pierde parte de los mismos al entrar en contacto con el aire.
Mejor sabor: El sabor del café en grano, al igual que el olor y el aroma, es más intenso.
Se conserva durante más tiempo: El café en grano tiene un mayor tiempo de vida útil. Si se lo almacenas bien, es posible disfrutar de una bolsa de café en grano durante semanas sin notar pérdida en su calidad.
Tiene mejor textura: La textura del café tiene que ver con la densidad del café al entrar en contacto con las papilas gustativas. El café en grano tiene mayor textura y es más suave que el café molido comercial.
No se oxida: El café en grano tarda más en oxidarse si se lo compara con el café molido. Esta propiedad se debe a que hay menos superficie de contacto o exposición con el oxígeno.
Mejor control de la molienda: El café en grano tiene el beneficio de regular el tipo de molienda, ajustándose al tipo de café que quieras preparar.
Más respetuoso con el medio ambiente: El café en grano suele estar disponible en envases eco sostenibles, como bolsas reutilizables o biodegradables, en lugar de paquetes que generan más residuos. Además, al elegir granos enteros se puede optar por marcas de café cuyo lema se base en prácticas éticas y sostenibles reduciendo así la huella ecológica.
Mayor nivel de cafeína: La cantidad de cafeína de una taza de café depende de varios factores, entre ellos el tipo de café, el método de preparación, tueste, el proceso de molienda y el tamaño de la taza.
Con respecto al tipo de café, la especie robusta tiene mayor cantidad de cafeína en relación a la especie arábica. Conocé más sobre el tema leyendo este artículo: ¿Qué tipos de granos de café existen?
El otro factor influyente en la cantidad de cafeína es el proceso de molienda. Por lo tanto, el café molido contiene mayor cantidad de cafeína respecto a un café en grano. Cuanto más fina es la molienda mayor es la concentración de cafeína por taza.
Ahora que ya conocemos todos los motivos para elegir café en grano, es un hecho que aquellas personas que muelen el café y preparan la infusión, nunca dejarán de elegirlo. El café en grano, es un café en su estado más natural, que conserva sus propiedades en su totalidad y no está sometido a ningún tipo de procesamiento.
No obstante, la parte de los consumidores de café que no lo eligen, entre sus razones mencionan los pasos y elementos que conlleva su preparación tales como el molinillo de café.
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Consejos para moler café sin molinillo
Moler el café justo en el momento previo a su preparación, llenar la cafetera, disfrutar de los aromas que arroja el café durante su elaboración, te garantiza un resultado único que merece experimentar.
Como se expresó previamente, el elemento necesario para moler el grano de café es el molinillo.
Actualmente en el mercado, existen diferentes tipos de molinillos de café:
Molinillo manual: Este tipo de molinillo requiere más tiempo de trabajo y más esfuerzo respecto a los automáticos, pero como ventaja son más silenciosos y económicos, no recalientan el grano y permiten controlar el grado de molienda. A su vez, son prácticos, lo que permite su transporte en una mochila a donde quieras.
Molinillo eléctrico de cuchillas: Muele a gran velocidad y tritura todo lo que entre en contacto con él. La gran desventaja es que la molienda es heterogénea, es decir, algunos granos se trituran en trozos pequeños otros en más grandes mientras que otros se pulverizan. Como otra desventaja se puede mencionar la imposibilidad de elegir el tipo de molienda, lo que se controla acá es el tiempo de molienda. En consecuencia, el resultado con este tipo de molinillo es un café poco equilibrado de aroma, sabor y textura.
Molinillo eléctrico de muelas: Este tipo de molinillo es el modelo de referencia a nivel mundial en la elaboración de café de especialidad. Cuenta con dos partes trituradoras que giran en dirección opuesta, moliendo los granos en tamaño y forma uniforme. También permite ajustar el grado de molienda, su vida útil en relación al costo es larga y durante la molienda no se genera calor por lo tanto no altera las características organolépticas del café. En este caso, el resultado es un café equilibrado en sabores y aromas.
Ahora bien, ¿qué ocurre si no tenés un molinillo de café o el mismo se te rompió? A continuación, te brindamos algunas ideas caseras para que puedas prepararte una taza de café partiendo de café en grano, pero sin molinillo.
Opciones para moler café sin molinillo
Uso de un mortero: Así como se emplea un mortero para moler especias, es posible realizar la molienda de los granos de café utilizando dicho elemento. Moler hasta alcanzar el grado de molienda deseada o dependiendo el tipo de cafetera que uses.
Licuadora: Moler los granos de café de a poco y a baja velocidad siempre supervisando para que los granos queden molidos, pero no pulverizados. Luego de usar la licuadora, sanitizar bien para que no queden aromas intensos en el artefacto.
Procesadora de alimentos: Un resultado similar al obtenido con la licuadora puede lograrse mediante el uso de la procesadora de alimentos. Las consideraciones también son similares, molienda gradual y a baja velocidad para poder “controlar” el grado de molienda.
Rodillo de cocina: Por último, si no contás con ninguno de los elementos arriba mencionados podés emplear el rodillo de cocina siguiendo estos pasos: Colocar los granos arriba de una tabla para cortar y con ayuda de un cuchillo, cortar ligeramente los granos de café y verter los mismos dentro de una bolsa de plástico transparente para alimentos. Acomodarlos de manera tal que queden dispuestos en una sola capa para facilitar el pasaje del rodillo hasta alcanzar el grado de molido adecuado.
Contar con las herramientas adecuadas es esencial para quienes aman el café, y un molinillo de café es uno de esos elementos indispensables. Este accesorio no solo garantiza que disfrutes de un café recién molido con todo su aroma y sabor intactos, sino que también te permite personalizar el grosor del molido según el método de preparación que prefieras, ¡te invitamos a conocer nuestros productos!
Ya estamos al final del artículo y esperamos haberte mostrado las mejores alternativas sobre cómo moler café sin molinillo. Recordá optar por un café en grano, ya que sigue siendo la opción más pura y menos manipulada, conservando sus antioxidantes y aceites esenciales que suelen perderse en el café molido o instantáneo. Además, es una elección más sustentable en comparación con otras versiones. Si sos amante del café, ¡elegí siempre café en grano!