Las embarazadas pueden tomar café?

Una de las preguntas más frecuentes en las personas es sobre la ingesta de bebidas y alimentos en las embarazadas pero… ¿Las embarazadas pueden tomar café? 

Cuando preparamos el café, empieza la estimulación, su aroma activa nuestro cerebro, poniéndonos alertas y espabilados, incluso antes de que la cafeína haga su efecto en nuestro organismo. Para este grupo de consumidores tenemos una respuesta afirmativa pero con algunas reservas.

¿Las embarazadas pueden tomar café?

Existen varios estudios científicos que analizan si las embarazadas pueden tomar café sin sobrepasar la ingesta diaria de 150/200 ml. Esto se debe a que la cafeína es un estimulante que acelera el ritmo cardíaco y puede elevar la tensión arterial, algo nada recomendable si estás esperando un bebé. Igualmente cada organismo reacciona de maneras distintas, así que siempre consultar con su médico.

¿Cuál es la alternativa?

La alternativa más práctica y sin riesgo para que las embarazadas puedan tomar café es optar por el descafeinado. Es la forma más adecuada de seguir disfrutando de esos aromas mañaneros que estimulan el despertar y sin los efectos de la cafeína. Ya me imagino lo que están pensando, es descafeinado no es lo mismo, ya lo probaron y no les gustó. Bueno, es posible, como cualquier café, puede ser de calidad o no. Esa es la diferencia.

¿Cómo se produce el café descafeinado?

Cualquier empresa torrefactora de café, para producir el descafeinado lava el grano verde de café (antes del tostado) con agua, un solvente natural que activa la cafeína y la extrae del mismo, pero en este proceso también le quita el aroma y sabor, obteniendo una infusión muchas veces insípida e insabora. 

Lavazza en cambio, usa un proceso diferente, satura los granos con vapor de agua y les inyecta dióxido de carbono a alta presión para quitar la cafeína de manera más selectiva, obteniendo un descafeinado más eficaz y siguiendo con el tostado y molido natural del café, obteniendo una infusión con aroma y sabor, que seguramente no puedas diferenciar de un café normal, salvo por la falta del efecto de la cafeína.